Tecnología
En una actividad como la construcción donde la tecnología ha tenido una aportación mucho más discreta que en otros ámbitos (como las comunicaciones o los transportes), SATO es consciente de la importancia que tiene para un correcto desarrollo de su actividad.
En toda su trayectoria histórica, SATO ha cuidado la tecnología en sus procesos constructivos aplicando las innovaciones disponibles en el mercado y asumiendo retos como ninguna otra empresa en España. La recarga de bloques en el Dique Príncipe de Asturias o la recuperación de bloques de 90 t en el contradique del Muelle de Minerales, ambas en el Puerto de Gijón, así como la obra actualmente en ejecución de habilitación y mejora de la dársena exterior y abrigo exterior de San Andrés del Puerto de Málaga, son ejemplos de aplicación de tecnología propia desarrollada por SATO.
La utilización de tecnología propia (tanto en el diseño de la obra, como en medios auxiliares o en las actividades de seguimiento y control de ejecución) es posible gracias a la existencia de unos servicios técnicos centrales que permiten el control sobre el diseño y ejecución de las distintas tareas, aportando soluciones novedosas a los problemas de nuestros clientes, de forma que la adecuación entre la solución y el problema a resolver sea completa.
De igual manera, la estructura de SATO, tanto a nivel de jefes de obra como de dirección y servicios centrales, está completamente implicada en la política de I+D+i de OHLA, aportando ideas y proyectos y colaborando en los proyectos generales del Grupo, aportando con sus inquietudes y soluciones un importante impulso al liderazgo del Grupo en I+D+i en España.
SATO dispone de la certificación IDI-0045/2009, según la norma española UNE 166.002, para su Sistema de Gestión de la I+D+i. Este sistema certificado permite a SATO la realización de proyectos con una mayor calidad técnica y aporta transparencia y rentabilidad a sus actividades de I+D+i.
Reconocimiento internacional
SATO cuenta con diversas patentes y con relevantes muestras de reconocimiento internacional a su capacidad innovadora, como los galardones obtenidos en 2011 en la 39ª edición del Salón Internacional de Patentes de Ginebra, la feria más grande del mundo en su género, en la que SATO se alzó con la medalla de oro con mención de honor y el premio al mejor invento español por el Cubípodo y con la medalla de plata por la pinza para extracción de bloques SATOGRAB. También en 2011, la Autoridad Portuaria de Málaga obtuvo el Premio Nacional de Innovación, en su categoría de compra pública innovadora, por el proyecto citado en el párrafo anterior, que ha supuesto la primera aplicación del Cubípodo en un puerto real.